El Denario (Parte 2)

Capítulo 19:

Ella se veia como si algo muy importante y muy doloroso iba a salir de su boca, quizá me va a contar sobre la muerte de su novio, al parecer desde que él murió ella se ha vuelto así, aullando a la noche con su magnífica sonrisa, su baile de moda y su cuerpo de angel, ella es una sirena nocturna, recuerdo aquella primera vez que la conocia, mientras estaba en la pista de baile con ella pude ver las miradas sobre ella, ser deseada no era para ella extraño, ella lo sabía bien y sabía como usar esa atracción, lo sé muy bien pues esa vez acabé en el Aristo* con ella.

- Esta bien- le dije -¿Qué es lo que me quieres contar?- Inquirí.
- Hace diez años yo era la chica más feliz del mundo, mis padres tenian un negocio de ventas en el interior del país, les daba dinero suficiente para acceder a mis caprichos, además soy hija única, me daban lo que queria, todos mis gustos, asi estuve felíz por varios años, hasta que llegó el día en el que mi vida cambió, mis padres se habían ido a pasear a la sierra, mi padre viajaba mucho asi que conocia muchos lugares, yo estaba en la universidad en plenas clases asi que no pude acompañarlos, ellos no volvieron, el carro de mi padre se salió de la carretera y termino en el fondo de un cerro, desde entonces me he quedado a vivir con mi tía, mis padres me dejaron su ahorro y la casa, la cual alquilo, no puedo dormir en esa casa, desde esa vez me dije que sin importar lo que pase no dejaria que los problemas me agobien. Hace varios años conocí al chico de mi vida, era el chico más dulce, guapo e inteligente que pudiera conocer, no pasó mucho antes de que me enamorara perdidamente de él, pero a pesar del amor, no pudimos seguir, el era tan inteligente que se le presentó la oportunidad de su vida, ahora está en Japón culminando su carrera, lo amaba tanto que intentamos mantener una relación a distancia, pero sin contacto el amor se desvanece, despues de eso ya no queria volver a enamorarme, no quería volver a amar, pero estaba equivocada, el amor no es algo que se pueda esquivar o buscar, es algo que te encuentra, no puedes evitarlo, solo tienes que poder entregarte, y yo me rehusaba, no queria entregarme, Hace dos años conocí a Alejandro, él no era un principe azul, él era como tú, andaba por la vida solo ahogando sus penas, tratando de ponerle pausa a su dolor, nunca stop, pero poco a poco fue abriendose conmigo, me contó sobre su infancia y como le pegaban de niño, y muchas cosas más, no lo mostraba, pero lo que él quería era amar, no se cómo pero pasando los meses ya no lo veía como antes, me había enamorado otra vez, otra vez volvía a ser felíz, verdaderamente felíz, -Ella empezó a llorar- entonces un estúpido ebrio lo atropelló, desde entonces estoy así, en las noches en la disco, me volví en los mismo que Alejandro era antes de conocerlo, he intentado dejarlo, pero no puedo, me es difícil olvidar, OLVIDAR NO ES PARA TODOS, dias antes de morir él me regaló este anillo y me dijo; Esto me lo dió mi madre antes de morir, durante mucho tiempo lo tenía solo como recuerdo pero desde que te conocí me dí cuenta de lo que significa, no importa el daño que sienta por el pasado, es el ahora lo que realmente importa y eres tú quien me hace felíz y me importa.

Todo lo que Valeria me dijo hizo que de repente ya no sienta un extraño luto, ella tenía razón, yo nunca deje de sentir un poco de temor cada vez que salia a perderme, ¿Cuál es el siguiente paso ahora?

_____________________________________________

* Aristo: Telo en el distrito de Lince.